15 de octubre 2012
Hoy parecía que el profesor se estaba alargando más que nunca, aunque la verdad, esa noche tampoco había dormido bien, y dos horas de antropología criminal no ayudan mucho, sin embargo, las horas se pasaban más rápido siempre que pudiera observar a Mathew.
Mathew era el chico nuevo de clase, venía de Irlanda, del Condado de Cork, o eso había dicho a comienzos del semestre. Se le veía un poco mayor que el resto, pero eso era un punto a mi favor, ya que no entre a la Universidad con la edad en la que se suele entrar. Justo en el año que debía comenzar mis estudios superiores, el negocio familiar, una pequeña hamburguesería, llevaba una racha algo mala, y tuve que trabajar para poder conseguir algo de dinero para la matrícula y la vida universitaria. Ya que nuestra familia vivía a las afueras de la gran ciudad, e ir a la Universidad supondría un alojamiento allí, que yo en el fondo deseaba. Quería dejar el pueblo y adentrarme en la ciudad, quería viajar y disfrutar de cada momento, bueno, como querían todos los jóvenes de 18 años en ese momento.
No me había percatado que mi mente había desconectado por completo de la clase hasta que vi a Jason[1] plantado delante de mí. Jason era el típico chico guapo de clase, era alto, rubio, con ojos verdes y siempre vestía con vaqueros y camisa. Todas las chicas de clase están enamoradas de él, pero a mí no me parecía gran cosa, pese a su aspecto, no daba pie con nota en los estudios y su modo de pensar no encajaba muy bien con el mío.
– ¿sí?
Jason- ¿estabas en tu mundo eh?, Te decía que si te apuntabas esta tarde a tomarte unas cervezas, vamos a ir unos cuantos de clase
La verdad es que tenía millones de cosas que hacer antes de tomarme una cerveza con mis compañeros ya que desde que vivía sola tenía que hacer todas las cosas de casa, y además de que tenía que repasar lo último que había comentado el profesor, pero unas cervezas no me matarían.
– claro
Jason- perfecto, luego te llamo para concretarte sitio y hora, adiós
Estaba súper contenta y nerviosa al mismo tiempo, primero tendría que ir corriendo a comprar lo que me faltaba, si no mañana no tendría nada para desayunar, pero, que me iba a poner, un mes de clase y aun no conocía a casi nadie, solo a Matthew, y él no sabía de mi existencia y bueno luego estaba Jason que era el típico graciosillo de clase, creo que no había nadie que no lo conociese.
Corrí al supermercado y compre lo necesario para sobrevivir una semana más, la verdad es que aún no tenía mucha idea con esto y compraba de poco en poco, y eran estos momentos en los que echaba de menos a mi madre y la facilidad con la que llenaba el carro en un momento y para todo el mes.
Justo al doblar la esquina para incorporarme a coger la parada del bus, vi a Matthew solo en la oscuridad, parecía que estaba hablando con alguien pero no se veía a nadie, se dio la vuelta bruscamente cuando se percató que le observaba y comenzó a esconderse en la oscuridad del callejón. Estaba guapísimo con esa chupa negra que llevaba, era un chico tímido y solitario, pero, ¿Qué haría solo en ese callejón?, no le di mucha importancia y corrí hacer todas las cosas que tenía que hacer.
Me reuní en donde me dijo Jason y allí estaban todos, Carla, Samantha, Michael, Christofer, Jason[2] , discutiendo sobre cual eran los primeros pasos que se debían de hacer para identificar la hora de un cadáver.
Jason- ¡Chris!
Primero estuvimos hablando de la universidad, del horrible profesor Charles, después estuvimos jugando al futbolín y tengo que decir que las chicas le dimos una gran paliza a los chicos, todos me caían fenomenal, me estaba divirtiendo hasta que Samantha dijo: mirar chicos, es Matthew
Carla- Que chico más raro y siniestro, os habéis fijado que siempre se sienta solo y no habla nada.
Michael- le habrá comido la lengua el gato
Yo- él no es de aquí es de Irlanda, bastante difícil es empezar a hacerse amigos nuevos como hacerlos fuera de tu propio país. Mis palabras salían solas en defensa de Matthew, quizás fuera por las cervezas que ya me había tomado pero no me había percatado del tono en el que las había dicho, parecían que me estaban diciendo a mí, y por eso me ruborice tanto
Jason- vamos Chris no te pongas así, estamos bromeando
Samantha- no dirás que te mola el nuevo, con esa chupa negra y la cara de pocos amigos que lleva siempre, además me han dicho que es un chico muy estúpido.
Yo- porque no te haya prestado atención a ti no significa que el chico sea estúpido.
Con esa última frase supe que había empezado mi enemistad con Samantha para el resto del curso, pero no me importaba, pague lo que había tomado y di las gracias a Jason por haberme invitado, no quería estar allí más, había pasado una buena noche, pero tenía muchas cosas que hacer y para ser sinceros no sé porque me molestaba tanto que dijeran esas cosas de él.
Ya en casa me di cuenta que me habían subido las cervezas, porque iba medio mareada, pero como estaba sola no tenía que preocuparme en recoger ni nada, asique me desnude de la puerta a mi habitación y me metí en la cama.
***
Al día siguiente decidí ir a la biblioteca a acabar de estudiar y hacer unos ejercicios para la clase del profesor Charles, allí sentada vi a Matthew con unos amigos, me sorprendió tanto verlo con alguien, pero no paraban de reír y me fascino su risa, yo que siempre había sido una chica poco tímida no sabía cómo empezar una conversación con ellos, pero lo deseaba tanto, los 3 chicos con los que estaba no los conocía de nada, pero todos eran guapísimos, y frente a ellos me plante, ¿Qué porque lo hice?, No sé, pero algo dentro de mí me arrastraba hacia ellos y no podía resistir esa sensación.
Chris- Hola
-Hola, contestaron casi a la vez, menos Matthew, que ni se indignó a levantar la cabeza, por lo que me supuso ponerme muy nerviosa, estaba haciendo el ridículo frente a cuatro chicos guapos y el que me interesaba ni me miraba. Me quede en blanco mientras los seis ojos de los chicos me observaban, hasta que dije
– veréis es que no soy de aquí, y me preguntaba si me podíais decir dónde está el cine más cercano, es que he visto que han estrenado la nueva de película de Stephen king y no me la puedo perder.
– Ah, justo esa voy a ir a verla esta noche, ¿te apuntas?, me dijo el chico más moreno, y en ese mismo momento Matthew levanto la cabeza y me observo, no sé lo que esperaba, pero una oleada de nerviosismo recorría mi cuerpo, y empecé a pensar que quizás estuviera celoso o bueno, sería una gran oportunidad para saber algo más de él, su amigo no me interesaba, pero seamos sinceras, de la forma que me miraban todas las chicas de la biblioteca, si rechazaba esta cita con él, sería la chica más tonta de la universidad entera, y si la aceptaba sería la envidia de todas.
Chris- Claro, podemos ir a partir de las 22:00, es que antes tengo que organizar un poco la casa. En ese justo momento vi como los labios de Matthew dibujaban una delgada línea.
– Encima de guapa, independiente me dijo el chico, vamos al de las 22:00, por cierto me llamo Jack, encantado, y no dimos dos besos
Chris- a las 22:30 en la puerta del cine, hasta luego
Me tire todo el camino de la biblioteca a casa pensando lo que había acabado de ocurrir, fui a hablar con Matthew y acabé teniendo una cita con el atractivo de su amigo Jack, pero sobretodo pensaba en la reacción de Matthew cuando dije que sí, quizá si sabía quién era yo, o no le habráía caído bien.
No tarde ni diez minutos después de lo sucedido cuando llame a Clara y a Michael, mis dos mejores amigos desde que estaba en la universidad. Clara era una chica dulce, rubia y muy guapa, pero sobre todo era noble y siempre se podía contar con ella, Michael, bueno, era el típico ligón, siempre tenía echado el ojo a alguna chica, pero era muy sincero y amable, un buen amigo.
Quedamos en el Offcoffee, una cafetería que había en la ciudad cerca del campus estilo Starbucks, allí podíamos estar horas y horas hablando de cosas que nos habían ocurrido, desahogándonos o simplemente pasando el rato.
Clara- ¿Enserio?, ¿Jack Peterson?, vas a ir al cine con el chico más guapo de toda la Universidad, que digo de la Universidad de toda la ciudad, madre mía pero ¿qué vas hacer?
Michael- es una cita Clara relájate, lo que se hace en las citas, entrar al cine, calentar el terreno y….
Chris- ¡No es una cita!
Clara y Michael- claro que no Chris y nosotros somos tontos, todo el mundo entiendo eso como una cita.
Pero en realidad tenían razón, iba a tener una cita con Jack, y yo solo quería hablar con Matthew, pero es que ni tenía su móvil para anular la cita.
De camino al cine me vibro dos veces el teléfono pero cuando iba a cogerlo se colgaba, además como era un número desconocido tampoco le di mucha importancia, cosa que me arrepentiría pronto.
Iba pensando en mis cosas cuando su figura en la puerta del cine me hizo parar, Jack era un chico atlético, moreno, alto y muy guapo, era un graciosillo, aunque no con sobresalientes pero aprobaba siempre los exámenes, vestía con pantalones caídos y anchos y camisetas largas y siempre iba despeinado, pero hoy, esta noche, frente al cine, con esos vaqueros ceñidos, esa camisa y ese peinado… ¿Jack Paterson dónde estabas todo este tiempo?
Jack- Uf. Ya pensaba que no venias
Chris- si bueno, es que se me han caído las llaves y he parado a cogerlas
Jack- ¿vamos?
Chris- vamos
Jack- espera te tengo la puerta.
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Rincón de Miriam 